Pastoreo de vacas: una práctica clave para la ganadería eficiente y sostenible

onlinezebrasem
hace 3 días
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Pastoreo de vacas: una práctica clave para la ganadería eficiente y sostenible

El sector de la ganadería moderna está en pleno desarrollo y evolución. En un contexto donde la eficiencia productiva, la sostenibilidad y el bienestar animal son cada vez más una prioridad, el pastoreo de vacas es una técnica esencial dentro de los sistemas productivos. El pastoreo, lejos de ser una práctica en desuso, se ha consolidado como una gran estrategia eficaz para optimizar la alimentación de vacas lecheras en pastoreo, mejorar la calidad de la leche y carne y reducir costes.

En este post detallaremos en profundidad la importancia del pastoreo de vacas, los distintos tipos de pastoreo que se practican hoy en día, los beneficios que tiene sobre el ganado y el manejo adecuado de los recursos para garantizar la sostenibilidad. Una guía actualizada para ganaderos cuya prioridad es una producción eficiente alineada con las exigencias del mercado.

Importancia del pastoreo en ganadería bovina

El pastoreo de vacas ya no es solo una cuestión de tradición, se ha convertido en una herramienta que impacta directamente en la productividad de las explotaciones ganaderas. Especialmente en sistemas de producción lechera, la alimentación y cuidado de vacas lecheras en pastoreo garantiza un acceso continuo a un pasto fresco. Esto se traduce en una dieta más natural, con un impacto muy positivo en la composición de la leche y rica en fibra efectiva.

Las vacas de libre pastoreo tienden a tener un comportamiento más tranquilo, con menos riesgo a sufrir enfermedades metabólicas y una mejor conversión alimenticia. Todo ello acaba contribuyendo a una mayor longevidad de la vaca y una reducción en el uso de insumos veterinarios, de manera que se mejora la rentabilidad global del sistema.

En lo que respecta al medio ambiente, el pastoreo tiene un papel importante. Si está bien gestionado, con el tiempo mejora la biodiversidad vegetal, evita la erosión y hace que las explotaciones sean más resilientes ante el cambio climático.

Tipos de pastoreo de vacas

Hay muchas maneras de aplicar el sistema de pastoreo de vacas y esto variará en función del clima de la zona, el tipo de suelo, el tamaño del terreno y los objetivos productivos que se marquen en cada finca. Los principales pastoreos son:

Pastoreo continuo

Las vacas en este sistema tienen un continuo acceso a la misma parcela durante periodos largos. Es fácil de manejar, pero con el tiempo puede llevar a la degradación del pastoreo si no se controla la carga del animal.

Pastoreo rotativo

Requiere dividir el terreno en varias parcelas y rotar a las vacas entre ellas. De esta forma el forraje se puede recuperar entre turnos. Esto hace que se mejore la disponibilidad y la calidad del pasto. Es ideal si se quiere optimizar la alimentación de vacas lecheras en pastoreo sin agotar el recurso forrajero.

Pastoreo racional

Está basado en principios científicos y busca maximizar la eficiencia del pasto y del animal mediante rotaciones controladas y planificadas. Si bien es verdad que requiere de una mayor inversión inicial, los resultados que garantiza son excepcionales en productividad y sostenibilidad.

Pastoreo en franjas

Se usa una cerca para poder limitar el acceso diario al pasto. Es eficiente para alimentación de vacas lecheras en pastoreo, porque permite controlar con más precisión la cantidad del forraje que se consume, por lo que se reduce el desperdicio.

Cada uno de los pastoreos tiene sus ventajas y desventajas, y elegir uno dependerá principalmente de los recursos y objetivos de cada productor. No obstante, todos los sistemas sí comparten un objetivo común: mejorar la productividad a la vez que se mantiene como prioridad el bienestar animal.

Beneficios del pastoreo para las vacas

Además de ser más felices, las vacas de libre pastoreo son más productivas. Algunos de los beneficios de adoptar este sistema son:

Mejora de la salud digestiva. El pasto al ser fresco es más fácil a la hora de digerir y proporciona la fibra necesaria para el óptimo funcionamiento ruminal. Se reducen así los problemas digestivos y se mejora la eficiencia alimentaria.
Comportamiento natural. Las vacas sufren de menos estrés y más bienestar general al desarrollar su comportamiento natural.
Mejorar calidad en carne y leche. La alimentación que reciben del pastoreo mejora el perfil nutricional de la leche, ya que se sube el contenido en ácidos grasos saludables como lo es el omega 3.
Menor riesgo de enfermedades. El acceso a un espacio libre reduce la probabilidad de que los animales sufran enfermedades respiratorias o locomotoras, que son comunes en sistemas intensivos.
Mayor longevidad. Las vacas que disfrutan de un sistema de libre pastoreo suelen vivir más, por lo que los costes asociados a la reposición del hato se reducen.

El bienestar de los animales ha dejado de ser una cuestión únicamente ética, es también un criterio productivo. Y el pastoreo de vacas es una de las formas más eficaces de conseguirlo.

Manejo de pastos y rotación de tierras

Si se quiere conseguir un pastoreo de vacas eficaz, es esencial una buena gestión del recurso forrajero. Entran en juego factores como el análisis del crecimiento del pasto, la planificación de las rotaciones y el control de la carga animal.

La rotación de tierras es fundamental. Permitir que cada parcela descanse lo suficiente tras el pastoreo, asegura que el pasto se recupere adecuadamente. De esta manera se mantiene la productividad y se evita un sobrepastoreo, lo que degradaría el suelo y reduciría la capacidad forrajera a largo plazo.

También sería esencial adaptar la carga animal a la disponibilidad forrajera. Usar tecnologías como sensores de humedad, medidores de crecimiento del pasto o sistemas que identifiquen al animal, permite al productor tomar decisiones eficientes.

Por último, pero no menos importante, el manejo de pastos debe tener en cuenta las condiciones estacionales y climáticas. El uso de especies forrajeras que estén adaptadas a cada estación permite un suministro constante de alimentos, lo que es clave para mantener la productividad a lo largo del año.

Sin duda, en un sector cada vez más exigente, el pastoreo de vacas es una estrategia fundamental para una ganadería rentable, sostenible y comprometida con el bienestar animal. Los diversos sistemas de pastoreo permite que cada finca se pueda adoptar a todo tipo de explotaciones y los beneficios que se notan en la salud y productividad de las vacas, son evidentes.

Referencias